Ramón Masats es un autor clave para comprender la madurez del reportaje fotográfico en nuestro país, un referente en la historia de la fotografía contemporánea y un imprescindible por su aportación al concepto de autoría y construcción de la imagen fotográfica. Su labor ha sido reconocida con el Premio Nacional de Fotografía, el de la Comunidad de Madrid y el Bartolomé Ros entre otros muchos. Su obra forma parte de las principales colecciones y museos.
La exposición “Visit Spain” recoge el trabajo de este autor durante una década (1955-1965), en la que recorrió este país para darle visibilidad a través de las páginas de Gaceta Ilustrada, un semanario que pretendía seguir la estela de las grandes publicaciones gráficas americanas y europeas a través de los ojos de sobresalientes reporteros que definitivamente fijaron el rumbo del mejor reportaje patrio en contenido y forma gráfica.
Aquella década marcó el inicio de muchas cosas, entre ellas el fin de la autarquía y el inicio de la apertura al exterior de la aislada dictadura franquista. El título de este proyecto corresponde precisamente al primer eslogan que el gobierno escogió para la primera campaña del recién creado Ministerio de Información y Turismo. En pleno estrangulamiento económico, invitar al mundo a viajar a este país, suponía un intento de salir del aislamiento y con ello mejorar la balanza de pagos de la exhausta economía del país. La decisión resultó ser también la espita de entrada de costumbres y libertades que propiciaron poco a poco la inevitable apertura del gobierno al que acceden los tecnócratas que, aun bajo la vigilancia de la dictadura, permitieron una cierta sensación de aire fresco a la sociedad. Curiosamente el retrato de esa España recayó en jóvenes fotógrafos que utilizaron la ironía desnuda de la imagen para dibujar un lenguaje distante del oficial, distante de la sola belleza formal, segaron el conformismo meramente artístico de la fotografía, reclamaron profesionalidad para el oficio y consiguieron aunar el realismo documental bajo su mirada personal.
Ramón Masats centró su mirada en ritos, celebraciones y fiestas, lo que él llama tópicos de la cultura popular, postales rituales que su mirada convirtió en agudas sugerencias irónicas contrapuestas al discurso oficial, suavemente contestatarias y envueltas en una geometría sobria y directa. Una construcción poderosa y una economía de medios que definitivamente influyeron en el lenguaje del futuro del reportaje documental.
La exposición consta de 145 imágenes que construyen un retrato de la sociedad de aquellos años a través de la óptica del autor, de ellas, 90 imágenes son absolutamente novedosas, nunca exhibidas anteriormente, y que junto a las más icónicas ya consagradas componen una síntesis del mejor Masats. Un relato novedoso, sorprendente y certero, al comprobar como el tiempo siembra nuevos significados en las imágenes documentales obtenidas hace siete décadas.
La exposición cuenta además con un video de sesenta minutos de duración, compuesto por una selección de los noticiarios cinematográficos NO-DO de esa década y un libro catálogo con más de 200 imágenes y textos de Sergio del Molino y del comisario. Imágenes cinematográficas de los informativos oficiales del régimen que ofrecen un contraste entre la realidad oficial de aquellos hechos y la irónica mirada de Ramón Masats.
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